¿Por qué es esencial el papel del notario en la coordinación entre el Catastro y el Registro de la Propiedad?
El notario actúa como legitimador y redactor de los documentos públicos necesarios para coordinar la información entre el Catastro y el Registro de la Propiedad. Esta coordinación, fundamental en el tráfico inmobiliario, asegura que la descripción gráfica y georreferenciada de una finca sea precisa y esté en concordancia con la realidad. Al actuar como intermediario, el notario facilita la incorporación de datos catastrales exactos, evitando discrepancias y protegiendo los derechos de los propietarios.
¿Qué procedimientos sigue el notario al firmar el documento público?
Durante la firma del documento, si los otorgantes confirman que la Certificación Catastral Descriptiva y Gráfica (CCDG) coincide con la realidad física de la finca, el notario incluirá esta certificación en la escritura, solicitando su inscripción en el Registro de la Propiedad. En caso de que haya discrepancias con la cartografía catastral, se deberá aportar una Representación Gráfica Georreferenciada Alternativa (RGGA). Aunque el notario no requiere trabajar con archivos GML, recomienda solicitar el Informe de Validación Gráfica (IVG) de la RGGA para garantizar la exactitud de los datos.
¿Cómo se asegura la autenticidad de los documentos electrónicos en el tráfico inmobiliario?
La Dirección General del Catastro firma electrónicamente documentos como la Certificación Catastral Descriptiva y Gráfica y el Informe de Validación Gráfica usando un Código de Verificación Seguro (CSV) de 16 dígitos. Este código permite a los diferentes agentes del tráfico inmobiliario identificar y verificar de forma rápida y segura la autenticidad de los documentos, sin necesidad de intercambiar físicamente archivos, proporcionando un proceso seguro y eficiente.
¿Qué información incluye el Informe de Validación Gráfica y cómo se utiliza en la notaría?
El Informe de Validación Gráfica (IVG) identifica todas las parcelas afectadas total o parcialmente. Este informe, obtenido mediante la Sede Electrónica del Catastro (SEC), permite al notario conocer las fincas colindantes y enviarles notificaciones pertinentes, facilitando así la transparencia en el proceso de delimitación. En el procedimiento notarial, es recomendable que el IVG se adjunte en las notificaciones para que los colindantes puedan manifestar su consentimiento o no oposición, promoviendo una tramitación informada.
¿Cómo facilita el IVG la gestión de alteraciones catastrales en la escritura notarial?
El IVG es una referencia crucial para la escritura de alteración de la descripción física de una finca, ya que vincula la representación gráfica con la descripción registrada en la escritura. Esta conexión evita errores de validación en el Catastro y asegura que la representación gráfica y las coordenadas georreferenciadas de la finca estén correctamente asignadas, proporcionando así una referencia inequívoca de la propiedad en el Registro.
¿De qué forma el notario interactúa con el Catastro para remitir alteraciones de propiedades?
Una vez firmada la escritura, el notario envía la información al Catastro de forma telemática, usando los medios electrónicos regulados por la Resolución de 26 de octubre de 2015. Este intercambio de información, que incluye la alteración catastral y la identificación de los titulares, garantiza que el Catastro disponga de datos actualizados para reflejar cualquier modificación en el parcelario, protegiendo los derechos de los propietarios y evitando futuros conflictos.
¿Qué validaciones realiza el Catastro con la información remitida por la notaría?
Al recibir la información, el Catastro realiza una validación técnica que verifica tanto los datos gráficos como los alfanuméricos, y se asegura de que se haya notificado a los propietarios colindantes afectados. Si la información no cumple con los requisitos, se genera un informe que indica las modificaciones necesarias para cumplir con los estándares. Esta validación asegura que el registro en el Catastro esté en completa sintonía con la realidad física de la propiedad y con la escritura otorgada.
¿Cuál es la importancia de la respuesta estructurada que el Catastro envía a la notaría?
La respuesta estructurada del Catastro proporciona al notario información detallada sobre el estado de las alteraciones catastrales, confirmando las referencias catastrales asignadas y cualquier cambio relevante. En caso de resultado negativo, el Catastro indica que no se puede iniciar el expediente de alteración catastral, informando al notario para que avise al otorgante de la necesidad de realizar correcciones. Esta comunicación continua garantiza una correcta actualización de los datos catastrales en el tráfico inmobiliario.
¿Cómo se utiliza el acuerdo de alteración catastral en el documento público notarial?
Una vez completado el proceso, el Catastro genera un acuerdo de alteración catastral que incluye la referencia de cada parcela afectada y que se envía al notario para su inclusión en la escritura. Este documento sirve como constancia de que la finca ha sido correctamente representada en el Catastro, asegurando la precisión de los datos en el Registro de la Propiedad.